USTEDES GOBIERNAN: ¡No dejen ir a los jóvenes de Ibagué, no pedimos nada regalado, solo oportunidades para crecer!

Por: Julián Betancourt Nieto

Las últimas cifras del DANE, colocan a Ibagué en el deshonroso primer puesto a nivel nacional en materia de desempleo con el 27,5%,  72.000 desempleados aproximadamente, y registra la desocupación juvenil en un 39,5%, escabroso, triste y desesperante para los muchos ciudadanos que habitamos este territorio en busca de oportunidades.

Desempleados y a la espera de un milagro aferrados a los discursos románticos llenos de esperanza de quienes gobiernan, unos, solo esperando la oportunidad laboral para un misero salario mínimo con el que puedan sustentar su mínimo vital, y otros como yo, tratando de impulsar nuestras propias ideas de empresa, la diferencia entre las dos posiciones no es ninguna, la semejanza es una: todos buscamos y estamos sobreviviendo con lo poco que se puede hacer, en una ciudad que se convirtió en alojamiento de pensionados, ninguno pedimos algo regalado, unos pedimos oportunidades para nuestras empresas, los otros piden trabajo, así que no nos regalen, ponganos a producir, pónganos a impulsar a Ibagué hacia adelante, no dejen ir a los jóvenes de su ciudad.

El miércoles los taxistas iniciaron protestas, el jueves continuaron y tras no ser escuchados bloquearon la ciudad un poco más de medio día, en la noche motociclistas en caravanas y tras toque de queda desafiaban la ley y el orden institucional, las barras del Deportes Tolima desfilaban por las calles y se tomaron el Parque Murillo Toro para celebrar sus 20 años, todas actividades a las que la Administración municipal actuó de manera reaccionaria y no preventiva de la mano de sus secretario de Gobierno que al contestar a los medios lo hace de manera discursiva y esperanzadora cuando la necesidad imperiosa y propia del momento requiere de comunicar con mucha contundencia.

Para rematar el día, algunos sectores políticos, cuya oposición al gobierno del alcalde Andres Fabian Hurtado es bien reconocida, convocaban una asamblea amplia de los diferentes sectores para evaluar el inicio de un proceso de revocatoria a este último, adjudicando el completo “desgobierno” en el que se encuentra la ciudad, ¿medida exagerada?, siendo objetivo y sin posicionamiento ideológico tal vez, no creo que como está Ibagué sea lo que más le convenga ahorita, pero tampoco se puede decir siendo consecuente con el primer párrafo de esta columna que la ciudad este bien, ¡nada está bien! Venimos hablando de obras y grandes inversiones que dinamizarán el empleo, pero solo es eso, “venimos hablando” decimos que la culpa ha sido de la emergencia sanitaria, pero la realidad es que lo correcto sería decir que la pandemia agravo el problema, porque hace rato venimos mal en Ibagué y mientras tanto solo escuchamos discursos y retórica, algo que el mismo exgobernador de los tolimenses Oscar Barreto Quiroga a reprochado en el ejercicio de lo público.

Como lo indicaba al inicio, los jóvenes y la ciudadanía ya no ven la luz al final del túnel, no vemos estrategias para recuperar el empleo ni a corto, mediano y largo plazo, y mientras tanto solo se habla en ruedas de prensa y por los canales institucionales de “estamos haciendo” el señor Exgobernador Oscar Barreto en su última columna “Fraternidad y conciencia social” al hablar de la encíclica del papa “Fratelli tutti” argumentaba “lo que aquí describe es una generación de odio constante para la confrontación, buscando fanáticos y enemigos, ideologizando los temas para réditos electorales, una ceguera constante, hasta la rabia y la soberbia de reconocer al otro, buenos comportamientos y acciones, cuando los tiene.” Y tiene usted razón señor exgobernador, sin embargo  la falta de oportunidades laborales, el apoyo a emprendimientos,  la inequidad y desigualdad,  la situación de desempleo que vivimos hoy en nuestra ciudad que poca respuesta tiene por parte de la institucionalidad, son situaciones que van generando la semilla perfecta para lo que precisamente usted describe, van generando un componente social con hambre, luego con rabia dispuesto a confrontar, a movilizarse y a un completo desprecio por la institucionalidad, se crea una ciudadanía predispuesta a discursos y retóricas para réditos electorales como usted lo indica, de caudillos que empiezan a mostrarse como canalizadores de las necesidades de los ibaguereños, de las necesidades que hoy tenemos los jóvenes que no pedimos nada regalado, unos piden trabajo, otros pedimos apoyo a nuestros proyectos:  lo mínimo en una sociedad.

Usted señor exgobernador bien lo decía en una columna pasada, un buen gobernante escucha, la sociedad ibaguereña está hablando de sus inquietudes, de sus carencias, los jóvenes nos estamos cansando, nos estamos yendo, y bajo estas circunstancias cualquiera pierde la objetividad frente a cómo vemos lo político-administrativo, objetividad que he tratado de llevar con responsabilidad cuando de hablar en medios se trata, pero hasta eso se acaba ante las circunstancias que nos presentan las dinámicas sociales y económicas de nuestra amada Ibagué, en nombre de esa objetividad, en nombre de muchos jóvenes, hombres y mujeres, trabajadoras y trabajadores, emprendedores y emprendedoras, en nombre de esos 72.000 desempleados, en nombre de las pocas o muchas palabras que he cruzado con usted le pido que la filosofía de los “hechos y del hacer” empiece  a realizarse ya en Ibagué, no podemos seguir esperando a que el próximo trimestre volvamos a ser los primeros en desempleo, ustedes gobiernan:

¡No dejen ir a los jóvenes de Ibagué, no pedimos nada regalado, solo oportunidades para crecer!