Ricardo Vivas, vocero de la Secretaría de Salud Departamental detalló las estrategias que han llevado a una disminución notable en los casos reportados de esa enfermedad.

En declaraciones a Enfoque TeVe, Ricardo Vivas, biólogo y profesional de apoyo en el programa de enfermedades transmitidas por vectores de la Secretaría de Salud del Tolima, explicó la situación actual de la fiebre amarilla en el departamento. A pesar de los avances, enfatizó que no se puede afirmar que el brote haya terminado.

«Nos encontramos en un proceso de reducción de casos, pero no podemos decir que hemos salido del brote o de la emergencia. Aunque hemos tenido una disminución en los casos reportados en los últimos tres meses, la situación sigue siendo monitoreada», afirmó.

El profesional destacó que esta reducción ha sido posible gracias a múltiples factores, incluyendo las campañas de sensibilización, el control vectorial y las intensas jornadas de vacunación. Según lo expresado, la Secretaría de Salud del Tolima ha logrado un impacto positivo con estas acciones, especialmente en áreas de riesgo.

«Es una consecuencia de las acciones realizadas desde la Secretaría: coberturas de vacunación, sensibilización, control vectorial y fortalecimiento de la vigilancia comunitaria. El departamento no tenía experiencia en fiebre amarilla, por lo que estamos aprendiendo y escribiendo una nueva historia sobre cómo enfrentarlo», explicó.

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El funcionario, también detalló el enfoque futuro en las zonas donde aún existen personas susceptibles a la enfermedad. A través de distintas estrategias se está realizando un esfuerzo concentrado para vacunar a las personas identificadas que aún no han recibido el biológico, particularmente en áreas como Dolores, Purificación, y Villarrica.

«Las personas que han desistido de la vacunación o que tienen contraindicaciones médicas serán las principales categorías a abordar. Nuestra meta es persuadir a aquellos que han desistido, especialmente con la ayuda de nuestros médicos del programa», comentó sobre el enfoque que se seguirá en los próximos meses.

El trabajo de la Secretaría de Salud del Tolima continúa con la esperanza de que, con el tiempo, la fiebre amarilla pueda ser controlada en el departamento y que la comunidad siga beneficiándose de las acciones preventivas y educativas implementadas.