De acuerdo con el enfermero con experiencia de más de 20 años en el sector salud, hay que ponerle la lupa urgentemente a los temas de salud mental en Ibagué.

La salud mental ha sido un problema que lamentablemente sigue impactando la sociedad en todo el mundo, Ibagué no es la excepción y sigue dejando huellas negativas y aumentando las cifras de suicidios.

La sala de redacción de Enfoque TeVe dialogó con Carlos Díaz, enfermero, homeópata, quien ha trabajado en el sector salud por más de 20 años y opinó sobre este preocupante tema.

“Es muy importante revisar la política pública, si bien es cierto mediante Acuerdo 008 del 2021se adoptó la política pública nacional en salud mental. Tenemos que revisar si esta política está siendo eficaz, si realmente está siendo asertiva y está llegando a las comunidades como tiene que ser”, resaltó Díaz

También manifestó que las estrategias no se pueden convertir en una hoja de papel, en solo información básica, que se necesita de verdad impactar a las comunidades ibaguereñas.

“No se puede volver una política pública un programa de planilla que solamente los resultados estén en un documento, si no que la acción sea concreta en las comunidades, que podamos llegar a los colegios, a las instituciones educativas, a las empresas, a las comunas, porque realmente la problemática es muy alta”, añadió el enfermero.

Además, mencionó que Ibagué ha tenido un incremento muy alto en el bullying, que ha hecho que muchos estudiantes deserten de las instituciones educativas y esto también es alarmante para todos.

“No solamente Ibagué padece el tema de suicidios, también tenemos los detonantes sociales como es el bullying, el maltrato de género, maltrato a la mujer, consumo de sustancias psicoactivas y un tema sumamente importante que es la parte ocupacional de nuestros jóvenes”, sostuvo.

Asimismo, argumentó que es de vital importancia un trabajo mancomunado y continuar los programas, pero fortaleciéndolos para que de verdad tengan efecto en la sociedad de la capital tolimense.

“Yo pienso que aquí hay que trabajar articulados con educación, para que educación también nos permita que se pueda dar la hora catedra de salud mental, donde podamos educar a nuestras comunidades, sobre todo un programa de protección y prevención», dijo.

Según Díaz, Ibagué padece de muchos factores que afectan la salud mental como es el desempleo, como es la falta de ocupación y sumarle a esto la falta de escenarios deportivos, que aunque no parezca es sumamente importante, porque muchos deportistas han dejado de practicar su disciplina o han tenido que abandonar la ciudad para poder buscar donde hacer sus actividades.

“Estos programas tenemos que revisarlos con lupa, mirar como les digo el cumplimiento, que no se convierta en un programa de oficina si no que realmente abordemos la problemática donde se necesita, como lo es en la comunidad”, puntualizó Carlos Díaz.