Cementerio de El Salado en Ibagué: Un lugar en completo abandono y olvido 

La concejal conservadora Sandra Varón entregó detalles de las situaciones que se viven en el lugar y le hizo un llamado a la Alcaldía de Ibagué. 

El Cementerio de El Salado, en Ibagué, está en completo abandono, convirtiéndose en un refugio para el consumo de sustancias alucinógenas y la profanación de tumbas, según denuncia la concejal Sandra Varón, quien exige a la Administración Municipal una intervención urgente.

«La situación es lamentable, especialmente para los residentes de la Comuna 7, donde se vienen presentando temas muy complejos y delicados. Hay también un grave problema de profanación de tumbas. En la entrada del cementerio se pueden ver muchas tumbas abiertas, con restos de huesos y otros elementos. Este cementerio se está prestando para muchos temas delicados, incluyendo el consumo de drogas«, expresó.

Varón también subrayó la inseguridad del lugar, mencionando que, incluso los familiares de los difuntos no se sienten seguros al visitar el cementerio. «Ya no podemos ni siquiera ir a visitar a nuestros seres queridos por la inseguridad que hay. Los habitantes de los alrededores temen pasar por el sitio. Este cementerio genera mucha desolación y miedo, está oscuro, no tiene iluminación«, aseguró.

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En su llamado a la Administración Municipal, la cabildante pidió que se tomen decisiones claras y efectivas para solucionar la problemática. «Es momento de que la Administración Municipal se ponga la mano en el corazón y tome una decisión. No basta con simplemente cerrar el lugar. ¿Quién se va a hacer cargo del mantenimiento de este cementerio que está completamente en el abandono? La curia no lo hará«, señaló.

Además, sugirió la posibilidad de realizar exhumaciones de los cuerpos para trasladarlos a un lugar más adecuado. «Si me preguntan, yo tengo familiares allí, y me gustaría que se hiciera la exhumación de los cuerpos, para que puedan descansar dignamente en otro lugar«, afirmó.

Varón también cuestionó la efectividad del comodato entregado al San Bonifacio, y si este continuará administrando el lugar. «Este cementerio lleva más de ocho años abandonado. La solución no puede ser solo un paño de agua tibia, necesitamos una respuesta eficaz y eficiente. Ya estamos cansados de promesas vacías«, concluyó.

El Cementerio del Salado sigue siendo un símbolo de abandono y desolación, y los residentes de la Comuna 7 esperan que las autoridades tomen medidas definitivas para garantizar la seguridad y el respeto por los difuntos.