Opinión
El crecimiento político por medio de la burocracia
Por: Manuel Guarnizo
Si un contratista del estado o funcionario público crece políticamente a través de la ejecución de sus funciones laborales, debería tomarse como PECULADO.
Es así, las personas que pertenecen a lo público, son empleados del gobierno, que tienen entre sus funciones hacer eso porque son aplaudidos y ovacionados. Quiero ser muy claro en este primer punto, una cosa es celebrar las buenas prácticas de un gobierno diligente que hace lo que le corresponde, otra muy distinta es agradecer y aplaudir a ciertos personajes por justificar sus sueldos.
Es el momento de entender que llevamos años dejando que los políticos pongan delfines en sus administraciones, ejecutan de forma correcta su labor y pasan a ser candidatos mostrando como gestión lo que hicieron para justificar sus sueldos de 4 o 5 salarios mínimos al mes (sin contar viáticos).
Es por lo mismo, que considero que se debe considerar como PECULADO, pues esn con bienes y recursos del Estado con los que estas personas desde hace muchos gobiernos vienen ejecutando sus campañas para delfines.
¿Hasta cuándo vamos a celebrar qué un funcionario o contratista haga bien su trabajo?
Se aplaude la gestión de un gobierno eficiente, no se aplaude a una persona por hacer su trabajo, ni debe tenerse en cuenta como gestión en tiempo de campañas la manera como justificaron sus sueldos, que son como 4, 5 o más veces, de lo que ganan sus votantes.