Déficit presupuestal de la USI superaría los $32 mil millones, según el concejal César Franco

Así lo reveló el cabildante en debate de control político a la Unidad de Salud de Ibagué, en medio de la polémica salida de la gerente Aura Galeano, gerencia que asumió en encargo el ‘exbarretista’ Jorge Cabrera.

En un debate de control político realizado en el Concejo de Ibagué, el concejal César Franco dio a conocer un informe alarmante sobre la situación financiera de la Unidad de Salud de Ibagué (USI), señalando lo que serían las alarmantes cifras del déficit presupuestal de la entidad. El cabildante advirtió que esta crisis financiera, que se ha agudizado durante el último año, podría tener repercusiones graves en la prestación de servicios de salud en el municipio y en la sostenibilidad de la institución.

«Con el informe fiscal a mediano plazo que nos entregaron, veo con preocupación que la crisis pasó de 2.900 millones de bodas a 32.000 millones de déficit. Esto prende las alarmas de quienes tenemos conocimiento en el sector de la salud«, señaló.  El concejal además expresó su preocupación por el manejo que se ha dado a los recursos, especialmente en la gestión de la exagérente Aura Galeano.

Falta de liderazgo y eficiencia en la gestión de la USI

Según su perspectiva, la actual situación financiera refleja una deficiencia en la estrategia de gestión, ya que la entidad no ha logrado atraer suficientes contratos con las EPS para mantener su sostenibilidad económica. «Lo que hemos encontrado es que hay personas que creen que solo con estar allí, el dinero del Estado va a llegar para administrar el hospital. Necesitamos un gerente que sea capaz de poner a producir el hospital, generar ingresos y ofrecer servicios de calidad», expresó el concejal.

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Por otra parte, fue aún más crítico con la gestión administrativa de la USI, asegurando que se necesita un «gerente productivo» que no solo sea una persona amable y accesible, sino alguien con la capacidad de liderar la institución hacia la rentabilidad y la autosostenibilidad. «Los hospitales, como cualquier empresa, deben generar ingresos. Si no se ofrecen buenos servicios y no se logran contratos con EPS, sencillamente el hospital entra en quiebra«, explicó.

Franco también señaló que uno de los mayores problemas de la USI radica en la burocracia excesiva, que, en su opinión, contribuye a los elevados costos operativos de la institución. «El nuevo gerente tiene que empezar por sentarse a trabajar, a hacer que la USI funcione de manera eficiente. Hay que eliminar la burocracia innecesaria y suprimir cargos que no aportan al funcionamiento del hospital. Eso permitiría reducir gastos, hacer más eficiente la operación y mejorar la calidad de los servicios», indicó.

En sus declaraciones, el concejal hizo un llamado a que la USI sea gestionada como una empresa lucrativa, donde los recursos se utilicen de manera eficaz y los servicios sean de calidad. Para él, la clave para superar esta crisis es «hacer rentable» la institución, para lo cual se deben mejorar los servicios, promover la utilización de los mismos por parte de la comunidad y lograr acuerdos con las EPS para garantizar el flujo de recursos. «Es fundamental que la comunidad utilice los servicios de la USI. Si logramos eso, tendremos más ingresos, menos gastos y una institución sostenible«, agregó.

En cuanto a la situación con la EPS Sanitas y la falta de firma para la prestación de servicios de la USI a más de 30.000 usuarios, Franco dijo no tener información directa sobre el tema, pero advirtió que la falta de calidad en los servicios prestados es una de las principales causas por las que las EPS deciden retirar sus contratos con las instituciones de salud. «Si no tienes un buen servicio, las EPS se retiran. Y si el hospital tiene tantas sedes y aun así no puede cubrir las necesidades, entonces algo no está funcionando bien«, puntualizó.

Finalmente, el concejal subrayó que el que sea designado como nuevo gerente de la USI tiene un gran reto por delante, ya que la situación financiera actual pone en riesgo la continuidad de los servicios de salud en la ciudad.

«Debe sentarse a trabajar, salir a conseguir que las EPS y demás entidades firmen contratos con el hospital. Si no se hace eso, seguiremos viendo cómo los gastos superan los ingresos y cómo el déficit crece aún más. Necesitamos un cambio en la gestión para garantizar que la USI sea sostenible y pueda seguir prestando servicios de calidad a la comunidad«, puntualizó.