Ibagué
Las palomas en Ibagué: Un problema ambiental que pone en riesgo la salud pública
Así lo expuso el biólogo investigador de la Universidad de Ibagué, Jorge García, quien habló sobre las alternativas para solucionar este tema que se presenta en el parque Murillo Toro y en otras zonas de la ciudad.
La proliferación de palomas en Ibagué está generando una creciente preocupación debido a los impactos negativos que estas aves están causando en el medio ambiente y la salud pública. Jorge García, biólogo e investigador de la Universidad de Ibagué, destacó este fenómeno y propuso soluciones para mitigar los efectos de la sobrepoblación de palomas en zonas como el Parque Murillo Toro, donde la presencia de estas aves es especialmente notoria.
«El problema hay que visibilizarlo, necesitamos trabajar mucho en temas de educación ambiental para entender qué es lo que está ocurriendo con las palomas«, señaló García, quien enfatizó que este no es un fenómeno exclusivo de Ibagué, sino que se trata de un problema global. Sin embargo, las poblaciones y las amenazas varían de ciudad en ciudad, y en Ibagué la situación ha empeorado en las últimas dos décadas.
Según el experto, la principal causa del aumento de las palomas en la ciudad es el alimentar a las aves, lo que fomenta su proliferación. «Sabemos que allí hay un problema que permite que las poblaciones aumenten. En los últimos 20 años, las poblaciones de palomas han aumentado de manera dramática», comentó el investigador. Este comportamiento ha llevado a que las palomas se encuentren no solo en el centro de la ciudad, sino también en edificios, conjuntos residenciales y otros espacios urbanos.
El biólogo advirtió que las heces de estos animales pueden ser un foco de contaminación y potencialmente representar un riesgo para la salud pública, ya que podrían contener bacterias y otros patógenos. «Las palomas están generando problemas, sobre todo por el tema de las heces, y potencialmente podrían generar problemas de salud pública debido a la presencia de algunas bacterias», explicó.
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En cuanto al manejo de esta situación por parte de las autoridades locales, destacó que, aunque se han dado pasos en la socialización del problema, aún queda mucho por hacer. «Creo que se ha comenzado a hablar del tema, pero necesitamos comenzar a trabajar en torno a decisiones informadas, basadas en investigaciones», mencionó también que recientemente, docentes e investigadores de la Universidad de Ibagué, como los profesores Miguel Moreno y Vilma Florido, participaron en reuniones con la Secretaría de Ambiente y Gestión de Riesgo para discutir posibles soluciones.
Además, sugirió que la intervención debe ser integral, comenzando con la suspensión del hábito de alimentar a las palomas, especialmente en lugares como el Parque Murillo Toro. «Lo primero que hay que hacer es una intervención integral. Ya sabemos que hay unas 10 personas que dependen directamente de alimentar a las palomas, es decir, hay unas personas que están involucradas ahí y se pueden tomar medidas respecto a qué otra alternativa hay en vez de alimentar las palomas», comentó.
Además, el biólogo propuso que las autoridades implementen una campaña educativa para sensibilizar a la población sobre los efectos negativos de alimentar a las aves. «Es muy importante que las personas comprendan que, al alimentar a las palomas, están contribuyendo a un problema mucho más grande de lo que parece», resaltó también que las decisiones deben ser tomadas de manera colectiva, para que las medidas no solo sean eficaces, sino también socialmente aceptadas.
En conclusión, Jorge García hizo un llamado a la comunidad y a las autoridades para que actúen de manera informada y responsable frente al creciente problema de las palomas en Ibagué. «Necesitamos un manejo integral, basado en la investigación y en decisiones colectivas, para que las medidas que tomemos beneficien a todos», concluyó.