Ibagué
“Un parque del terror, lleno de peligros”: Ciudadano sobre el Megaparque de la 60

Luis Ramos, habitante del sector, ha manifestado su profunda preocupación por el deplorable estado en el que se encuentra el arenero infantil ubicado en una zona de alta afluencia en Ibagué.
Una nueva denuncia ha llegado a la redacción de Enfoque TeVe, centrada esta vez en el deterioro que presenta el arenero destinado a los niños del ‘Megaparque la 60’, situado en la Calle 60 con Avenida Guabinal, detrás del restaurante Don Pedro.
Este espacio, concebido para la actividad física y la recreación de la comunidad, se ha convertido, según la denuncia del ciudadano Luis Ramos, en “un parque lleno de muchos peligros, tornillos, palos y juegos inestables”, lo que incrementa considerablemente el riesgo de lesiones para los menores.
En su relato, el denunciante expresó su consternación al observar “cómo la ciudad musical de Colombia es un foco de corrupción absoluta en todo sentido”, refiriéndose específicamente a la difícil situación que enfrenta como padre al llevar a sus hijos a un arenero que debería ser un lugar de esparcimiento.
“Ayer salí con mi hijo al parque que anhelo frecuentar con ellos cuando estamos acá en Ibagué, y desde que llegué en diciembre del año pasado, el parque que queda detrás de Mercacentro #4 es muy bonito, pero la zona de arena donde juegan los más pequeños es un desastre, un parque del terror lleno de peligros”, afirmó.
La inquietud del señor Ramos radica en el precario estado de la infraestructura, especialmente considerando que son niños pequeños quienes utilizan estas áreas. Si bien se han “presentado accidentes menores, hay tal peligro que puede pasar algo muy fuerte”, advirtió. Añadió que “hay muchos padres que siguen llevando los niños allí, pues la arena es la atracción de ellos, y con peligros y todo no hay más a dónde llevar a los niños”, poniendo de manifiesto la escasez de espacios recreativos adecuados para la infancia en la ciudad.
Asimismo, describió que esta problemática persiste desde el año anterior, pero no había manifestado su inconformidad con la esperanza de que se realizaran mejoras durante el presente año. “No había alzado mi voz en diciembre, pues pensé que en este nuevo año la administración principal de la alcaldía iba a tomar cartas en el asunto. Pero después de cinco meses, el parque sigue igual o peor en el descuido más infame”.
Sumado al problema del deterioro de las instalaciones, Ramos señaló la presencia de “lo inevitable, ya el consumo de alucinógenos de muchos muchachos que a veces llegan allí”, transformando un espacio familiar y seguro para los infantes en un lugar de alto riesgo para su integridad física y desarrollo.
Finalmente, el ciudadano reiteró su inconformidad y profunda preocupación: “Sinceramente, muy triste un parque tan central, rodeado de una zona residencial muy buena y está vuelto nada”, haciendo un llamado a la Administración Municipal para que intervenga y recupere un espacio que considera indispensable para los habitantes del sector.