La llegada del brasileño le ha brindado seguridad al pórtico del Deportes Tolima y júbilo a los tolimenses.

El Deportes Tolima bajo la dirección técnica de David González, sigue obteniendo buenos resultados en la Liga Betplay Dimayor, que le ha permitido al cuadro de la ciudad musical meterse en los cuadrangulares luego de 2 temporadas y actualmente mantenerse como primero de la tabla de posiciones.

En un conjunto donde destacan principalmente jugadores como Yeison Guzmán y Brayan Gil, vitales en la ofensiva y ambos con más anotaciones en el semestre para el equipo de Ibagué, no obstante, a veces pasa desapercibida la labor bajo los tres palos.

En semestres anteriores producto de las lesiones de William Cuesta y Juan Camilo Chaverra, quedó a cargo a Cristian Vargas, con un desempeño irregular, sumado a una serie de percances, obligó al elenco Pijao a buscar en el mercado de fichajes un portero de garantías, topándose con el nacido en Santa Catarina, Brasil, exjugador de Peñarol de Uruguay con pasado y buena experiencia en el fútbol colombiano.

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De esta manera, Neto Volpi, pisaría tierras musicales, aceptando el cargo como portero titular del equipo de la capital tolimense para disputar la copa Sudamérica y los torneos domésticos. Sin mucho éxito en la parte final del primer semestre, siendo eliminados de torneo nacional e internacional, aun así, dejando buenas sensaciones con sus atajadas y saques largos.

La segunda campaña del 2023 con la llegada del estratega antioqueño, el conjunto enderezó su camino en liga, con el brasileño como uno de los más destacados, logrando conservar en 11 oportunidades la portería a cero y atajando 2 penales en el campeonato y saliendo figura en varios encuentros, hasta su fatídica lesión jugando contra Águilas Doradas, dejándolo por fuera del partido frente al Junior de Barranquilla, que se llevarían los tiburones y le arrebataría la posibilidad de volver a una final a la tribu.

A pesar de quedarse a las puertas de una final en su retorno al balompié colombiano, la hinchada ibaguereña, ha quedado embelesada con la labor de Volpi, sinónimo de seguridad y confianza en términos defensivos, considerado por gran parte de la afición como un ídolo.