Ibagué
Madre de Santiago Murillo le hace un fuerte llamado a los que hablan mal de él
Sandra Meneses, pidió respeto e invitó a los que se han pronunciado en contra de su hijo señalándolo de diferentes formas, a que presenten las pruebas.
Un año después del asesinato de Santiago Murillo, el joven de 19 años que perdió la vida en medio de las protestas y movilizaciones que se registraban en Ibagué. Donde la Fiscalía General de la Nación ya se ha pronunciado en las audiencias y ha corroborado que el joven no participaba de ninguna clase de acto vandálico.
El mismo que murió a causa de un proyectil de arma de fuego al parecer disparado sin razón alguna por el mayor Jorge Molano, hoy acusado y que ha cambiado de abogado en varias oportunidades presuntamente para dilatar el proceso en su contra.
Luego de este tiempo, ha habido algunos pronunciamientos y juicios de algunos cibernautas y ciudadanos que sin prueba alguna, han señalado a Santiago Murillo de diferentes maneras, lo que ha llevado que su madre se pronuncie y haga un llamado al respeto.
“Esta es una invitación a todas las personas que se atreven a mencionar a Santiago como si lo hubieran conocido, como si hubiesen sido testigos de que él hizo algo malo o atentó contra algo o alguien”, manifestó Sandra Meneses.
Finalmente, ella les pide que si existe alguna prueba en contra de su hijo, las hagan llegar a la Fiscalía y estas hagan parte del proceso que lleva el ente investigador en contra del mayor Molano.
“Y yo les quiero pedir un favor, cuando uno hace este tipo de afirmaciones es porque tiene evidencias, yo los invito a que las hagan públicas y las entreguen para que hagan parte del proceso”, puntualizó la progenitora del joven asesinado.
Además, es de recordar que según lo publicado por el diario El Espectador, la Fiscalía tiene cómo probar que, sin motivo alguno para disparar, Molano accionó su arma contra el joven, que estaba a 30 o 35 metros de distancia. También le reprocha a Molano, quien desde el principio se ha declarado inocente, que según las cámaras de seguridad la situación de orden público estaba en calma y que “no existía el más mínimo peligro ni para el oficial ni para los agentes a cargo de este”.