La estrategia del atletismo colombiano para los próximos años

La Federación colombiana del denominado deporte base no se ha quedado quieta durante la pandemia.

Creó un proyecto para lograr grandes resultados en los próximos años y espera tener al menos ocho finalistas en los Olímpicos de Tokio 2021.

Para la mayoría de las organizaciones deportivas en el mundo la pandemia por el COVID-19 significó una crisis. Sin embargo, la Federación Colombiana de Atletismo la asumió como una oportunidad para ajustar detalles y crear el plan estratégico para los próximos cuatro años.

El proyecto se aprobó luego de tres intensas sesiones del comité ejecutivo con la contribución de 21 ligas departamentales, así como atletas, entrenadores y especialistas en ciencias del deporte.

La meta concreta es que el atletismo se convierta en el deporte número 1 de Colombia en los Juegos Olímpicos de Tokio 2021, que su selección sea la mejor de Suramérica y esté entre las 10 primeras en eventos de la World Athletics.

La estrategia también está clara. Se debe mantener e incrementar el apoyo a los deportistas de alto rendimiento y darles fogueo internacional; colaborar con las ligas y clubes para el fomento del deporte formativo y recreativo como base y cantera de la élite; organizar más eventos locales para mejorar la competitividad; capacitar a entrenadores, directivos, voluntarios e inversionistas; masificar el atletismo en universidades, colegios, escuelas y organizaciones económicas, sociales y comunitarias, así como gestionar la creación de nuevos centros de alto rendimiento en las regiones de las que provienen nuestros mejores atletas, como Urabá, la Costa Pacífico y el Caribe.

A mediano plazo, el objetivo es que la delegación colombiana supere a Brasil, la mayor potencia atlética del continente, a la que le ha peleado el título en los recientes campeonatos regionales.

Y seguir incrementando el número de deportistas y medallistas en los eventos del ciclo olímpico, especialmente en los Juegos de París 2024 y Los Ángeles 2028.