Graciela Vergara debe renunciar por autoridad moral

Por: Mauricio Gutiérrez

Desde hace Nueve años, el Partido Liberal en el Tolima, no está pasando por su mejor momento, después de la amarga experiencia que dejó por problemas de corrupción en la fallida construcción de los escenarios deportivos.

Para esa época, ejerció como alcalde quien hoy está privado de la libertad, y por la presunta falta de presencia en los rincones del departamento, en la gobernación de Delgado Peñón, el partido liberal se ha venido desvaneciendo.

Ahora bien, desde ese periodo, la decadencia de este partido tradicional, no ha dejado de sorprender con escándalos, como el que está sonando en estos días, a raíz, de los problemas de corrupción, en la organización criminal que está siendo desarticulada, por la Fiscalía General de la Nación, con nexos directos, donde presuntamente su cabecilla o líder, es el senador del Partido Liberal Mario Castaño, oriundo del municipio de Pacora Caldas, a quien ya le realizaron la respectiva compulsa de copias en la Corte Suprema de Justicia, y a quien muy seguramente, una medida de aseguramiento privativa de la libertad, por la gravedad de los delitos, que es investigado, no le permitirá llegar hasta el 13 de Marzo en libertad o si llega a ser elegido, no le permitirá posesionarse de su cargo.

En el Tolima, actualmente la exdiputada por el Partido Liberal Graciela Vergara Monroy, quien es candidata actual, por ese movimiento a la Cámara de Representantes, tiene como llave y/o coequipero, al Senador Mario Castaño, quien quiere volverse a reelegir, y que, en su aspiración al senado en marzo del 2018, saco 3212 votos, en el territorio tolimense, pero que muy seguramente, si es reelegido, no podrá desempeñarse como senador.

Para los tolimenses, no es sano que una honorable mujer como Graciela Vergara, tengas nexos, con el senador Mario Castaño, y menos cuando se dice por propia voz de la Fiscalía General de la Nación, que presuntamente, son setenta (70) personas, las que hacen parte de esta estructura criminal, que se han dedicado a apropiarse de los dineros públicos, de quienes progresivamente se están realizando las respectivas órdenes de captura y que, por reserva  de la investigación, no sabemos si Graciela tiene nexos con esta estructura criminal, dejando al libre albedrio, de los juicios de razonamiento de cada Tolimense y que se agravan al no tener una posición o explicación  de parte de la hoy candidata.

Con ocasión a esta alianza entre Graciela Vergara y el senador Mario Castaño, surgen varios interrogantes; ¿qué tipo de acuerdos bajo la mesa realizaron para generar los apoyos recíprocos? ¿desde qué periodo de tiempo vienen trabajando juntos? ¿ha recibido Graciela Vergara algún tipo de apoyo laboral o económico de parte de Mario Castaño? Y el que quizás es el más fuerte: ¿Graciela Vergara hace parte de la estructura de Mario Castaño? Y como valor agregado ¿qué relación e interés tiene Mauricio Jaramillo con Mario Castaño y la lista en general a Cámara de Representantes del Partido Liberal en el Tolima?, a sabiendas que de igual forma están apoyando a José Luis Correa como candidato al Senado, oriundo del departamento de Caldas y que en su momento fue o sigue siendo coequipero de Mario Castaño. Estos son algunos de los interrogantes que, sin duda alguna, hace que los tolimenses, desconfiemos de estas candidaturas, con ocasión a los procederes y resultados de corrupción que presuntamente ha dejado el senador Mario Castaño en cada paso que da y que muy posiblemente, las respuestas se sabrán en las interceptaciones telefónicas y en los resultados de las investigaciones que hacen parte del expediente penal.

La mejor opción que tiene Graciela Vergara, para que su honorabilidad no se vea tan afectada, para que sus valores éticos y morales, no sigan siendo puestos en duda por parte de la opinión pública, es dar un pie al costado y desistir de su candidatura por el Partido Liberal a la Cámara de Representantes, evitando así que su buen nombre, sea puesto en el paredón de todo un departamento y de quienes posiblemente depositen su voto a favor de ella. O al menos hasta que la Fiscalía General de la Nación aclare su posible participación o probable inocencia.