¿Expulsión del Concejo de secretario de Infraestructura le costaría su puesto?

Diego Herrán fue expulsado del debate de control político por supuesto irrespeto a los cabildantes

Ibagué amaneció con la polémica por la expulsión del secretario de Infraestructura Diego Herrán del recinto del Concejo, debate de control político al que fue citado para que respondiera por las obras viales que se ejecutan en la ciudad, en especial por los atrasos que se presentan en la ejecución de la calle 103, eje vial que comunica la avenida Ambalá con la carrera quinta.

El alboroto se presentó cuando el funcionario en medio de su intervención atacó de forma directa al concejal de la oposición Rubén Darío Correa, al manifestar que su profesión como secretario de despacho no se comparaba ante una persona que sólo sabía hacer cabalgatas de caballito de palo, actividad que dejó en alto ante el mundo entero a Ibagué, al romper el Guinness Récord en este tipo de actividades al congregar a más de 7 mil personas en el parque Manuel Murillo Toro, comparación que caldeó los ánimos entre los cabildantes.

El concejal citante al debate de control político, Ricardo Zarta del Centro Democrático, calificó la actitud de Herrán como arrogante, de irrespeto a la corporación y al propio Rubén Darío Correa, señalándolo de querer incendiar un debate donde era más importante responder a las inquietudes de la comunidad que por más de 8 horas esperaron una respuesta por la demora en las obras de la calle 103. Otro de los fuertes críticos fue el cabildante Miguel Bermúdez, quien también arremetió contra lo expresado por el funcionario de la alcaldía.

Lo anterior conllevó a que el presidente del cuerpo colegiado del municipio, Eduard Alonso Toro, expulsara del recinto al secretario de Infraestructura del municipio, como al estudiante indisciplinado que sacan de un salón de clases.

Para finalizar, otro detalle que llamó poderosamente la atención, se presentó cuando en medio de la polémica, el micrófono de Herrán quedó abierto y se escucha la voz al parecer de la secretaria de Salud Johanna Aranda diciendo: «no diga nada más, quédese callado porque le pueden proponer moción de censura»; comportamiento que le podría costar el puesto, ante una posible decisión que pueda tomar el alcalde Andrés Fabián Hurtado, que para los concejales quedó muy mal por culpa de Herrán.