Opinión
El gobierno del Decrecimiento: Seguridad
Por: Juan Urrea
Se ha cumplido un año de la elección de Gustavo Petro como presidente de la República, en su discurso de victoria habló de lo que él denominó el capitalismo democrático y la política del amor como ejes de su gobierno; pero claro, quien llegó a definir la bandera del gobierno Petro fue su ministra de Minas y Energía, lo definió como la Teoría del Decrecimiento, en Seguridad el escenario no es alentador.
Colombia tiene un historial de delitos contra la libertad y la vida doloroso frente al accionar de grupos criminales, así, el secuestro en general, se ha incrementado en un 260% comparado al mismo periodo del año 2022, solo cercanas a las cifras que tenía el país en 2013 y 2014 y en específico el secuestro extorsivo ha llegado a un pico altísimo comparado a los últimos diez años por el mismo periodo. Ahora bien, las cifras del Ministerio de Defensa no solo describen un análisis comparativo de cifras sino que son las realidades que están viviendo los colombianos en un escenario de Paz Total que ha dado apertura sin mayores limites, a grupos criminales organizados en el país para hacer mérito y conseguir beneficios por parte del gobierno nacional.
Ahora bien, otro de los crímenes latentes y crecientes para el presente periodo es el de la extorsión, con la cifra más alta en los últimos diez años con un aumento del 33% comparado con el 2022, ante ello uno se pregunta ¿Cuál es la estrategia del presidente Petro para combatir esta clase de crímenes? No se conoce, porque pareciera que no hay estrategia distinta a la de buscar diálogos con grupos criminales, excarcelaciones sin un reflejo positivo en la disminución de crímenes por parte de estos grupos armados.
Las cifras de los demás delitos no son alentadoras, las promesas de impunidad para grupos terroristas y la proliferación de voceros de grupos criminales, permiten ver un nada esclarecedor mapa de seguridad en la nación; en el país no es sorpresa afirmar que muchas zonas donde los grupos criminales habían sido replegados y combatidos por medio del accionar de la fuerza pública, estén avanzando nuevamente en el control de economías ilegales y actuando contra la paz y tranquilidad de los territorios.
El país no puede dar pasos atrás frente a la Seguridad, es de máxima importancia que la seguridad del territorio pueda recuperarse ante el ascenso del crimen, la inversión y el desarrollo empresarial tiene una estrecha relación con la seguridad y no parece existir un liderazgo en temas de seguridad de la nación. Por ello es reprochable que los grandes avances de la Paz Total son la respuesta del ELN afirmando que la dejación de armas no era opción y la firme intención del gobierno Petro de subsidiar al ELN para que eviten secuestrar, y hay que dejarlo claro, no es solo por la constitución del vergonzoso Fondo sino porque el secuestro es un crimen de lesa humanidad no un sistema para mantener a unos forajidos en la selva colombiana.
Colombia requiere una ejecución de la Política de Seguridad clara, que desde la legalidad tenga todo el apoyo del país contra el crimen y que a su vez geste los resultados de paz y tranquilidad a los que el presidente Petro se comprometió a cumplir cuando juró como presidente de la República. Decrecer en temas de seguridad tiene un alto impacto en las familias colombianas y la economía nacional, el país ya ha vivido el decrecimiento de la Seguridad y son épocas que no deben repetirse ¡Que pare ya el decrecimiento!