El cabildante se salió de casillas por la falta de quórum para darle trámite a un proyecto de acuerdo de su iniciativa para institucionalizar la Semana de la Juventud.

En la clausura del primer periodo de sesiones ordinarias del Concejo de Ibagué, el escenario político se encendió con las declaraciones de Andrés Zambrano, cabildante de Alianza Verde, al acusar a sus colegas de ser «hipócritas, mentirosos y politiqueros«.

La sesión tomó un giro inesperado cuando un proyecto de acuerdo liderado por Zambrano para institucionalizar la semana de la juventud fue ‘boicoteado’ para no darle trámite.

Los cabildantes de gobierno, como hábiles ‘magos‘, desaparecieron del recinto, desbaratando el quórum y evitando el debate crucial sobre la iniciativa.

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El retiro de algunos cabildantes no pasó desapercibido para Zambrano, quien lo interpretó como una represalia por sus críticas a la secretaria de Desarrollo Rural.

La ‘jugadita‘, según él, destapó la falta de garantías para la oposición, y no dudó en calificar a la alcaldesa Johana Aranda como promotora de una ‘declaratoria de opresión a la oposición’.

Zambrano llamó ‘miedosos‘ a los concejales que abandonaron el recinto, describiendo esta táctica como su única opción para derribar el proyecto.

Esta confrontación política deja al descubierto las tensiones y desafíos que marcan el panorama político local, sugiriendo un escenario de conflictos y estrategias que sin duda impactarán el devenir de la gestión municipal.